
Así se desprendeEn Colombia el Banco de la República sigue un esquema de inflación objetivo en un régimen de tipo de cambio flexible.
Bajo este esquema, las acciones de política monetaria están encaminadas a que la inflación futura se sitúe en la meta fijada en el horizonte de política. En Colombia, dicha meta fue fijada por el BR en 3%.
Esta meta (que no se ha cumplido) se refiere a la inflación de precios al consumidor, que se mide estadísticamente como la variación anual del Índice de Precios al Consumidor (IPC).
Con el objetivo de alcanzar la meta de inflación, el Banco de la República fija la tasa de interés de referencia, también conocida como tasa de interés de política monetaria o de intervención. El Banco ajusta la oferta de dinero para garantizar que el Indicador Bancario de Referencia (IBR) a un día esté cerca de la tasa de interés de política monetaria. Los cambios en la tasa de referencia afectan la inflación y el crecimiento de corto plazo a través de distintos mecanismos de transmisión.
Banco de la República realiza subastas de operaciones REPO para suministrar liquidez al sistema bancario otorgando créditos a un día y, en ocasiones, a plazos mayores, todo esto con el objeto de que el Indicador Bancario de Referencia (IBR) a un día esté cerca de la tasa de interés de política que fijó la Junta Directiva del BR.
Los bancos respaldan estos créditos con títulos, principalmente de deuda pública (TES), con pacto de recompra según el plazo acordado. En algunos casos, cuando la economía presenta excesos en el mercado de liquidez primaria, el Banco utiliza las subastas de Depósitos Remunerados no Constitutivos de Encaje (DRNCE) para drenar estos excesos. En ambos casos, la tasa de interés de política sirve de referencia para estas operaciones.
Si el BR no hiciera nada de lo anterior no habría liquidez en el mercado monetario, subiría las tasa de interés y por ende tendríamos mayor inflación.
Ahora, por qué el BR no ja podido cumplir todo el tiempo desde 1999 la meta de inflación objetivo. Por varias razones:
1. Factores y shocks exógenos de oferta no controlables. Tipo cadenas de suministro globales, pandemia, guerras.
2. Alzas exageradas en factores de producción (SMLV) que incluyen primas políticas superiores a la inflación. De hecho, los 2,88 puntos porcentuales en exceso de la inflación en los que subió el SMLV terminarán generando pérdida de cerca de 100.000 empleos en Colombia en 2023.