Por Álvaro Archbold Nuñez
«El desierto está creciendo: !desventurado el que alberga desiertos¡
El 19 de noviembre de 2012, la Corte Internacional de Justicia de La Haya profirió sentencia sobre delimitación de los límites marítimos entre el Archipiélago de San Andrés y Providencia, y la República de Nicaragua, acogiendo gran parte de las pretensiones del vecino país.
Colombia y la población nativa del archipiélago perdieron los derechos exclusivos de explotación de los recursos pesqueros en los puntos más importantes y estratégicos de esta área del caribe insular occidental.
El archipiélago fue desmembrado y, perdiendo su unidad, le fueron amputados más de 75.000 km2 de mar y plataforma continental, en un fallo limítrofe que no tuvo en cuenta la existencia de nuestros derechos y la seguridad alimentaria del pueblo de este Archipiélago.
Los graves errores, y ambigüedades cometidas por la defensa de Colombia ante la Corte de La Haya, ya comienzan a sentirse. La Reserva de Biosfera “Sea Flower” ha sido desarticulada, y en gran parte desmembrada. La normatividad desarrollada por espacio de muchos años por la Corporación Ambiental para el Desarrollo Sostenible del Archipiélago, en las Áreas Marítimas Protegidas, se ha tornado aplicable solamente para aquella en donde aún conservamos la jurisdicción.
En efecto, mientras las empresas nicaragüenses dedicadas a la pesca industrial rastrean el hábitat de las langostas, a diestra y siniestra, el Gobierno colombiano mira hacia un lado, “haciéndose el de la vista gorda”, imposibilitando que los pescadores artesanales del Archipiélago puedan arribar a los bancos de pesca que otrora fueron su fuente vital de sobrevivencia.
Langosta espinosa adulta.
El próximo treinta de junio, finaliza la veda de capturas y hostigamiento a la Langosta Espinosa, iniciada el primero (1o.) de marzo pasado, adoptada anualmente por los Estados Unidos, las Bahamas, Honduras, República Dominicana y Colombia, exceptuando Belize, entre otras. Y es aquí, y a partir de ese momento, en donde se presentará el caos, la depredación y la anarquía en la captura de la langosta, adultas y juveniles.
LA LANGOSTA ESPINOSA, CRUSTÁCEO INOFENSIVO Y VULNERABLE.
Es uno de de los crustáceos más grandes que habitan nuestros arrecifes de coral y lechos de praderas marinas, que comienza su vida como larva microscópica. Considerado como un decápodo, con diez piernas, y un esqueleto espinoso que lo protege contra algunos depredadores, al no tener garras frontales, son inofensivas para los seres humanos.
Sin ser perturbadas y agredidas en su hábitat, pueden «sobrevivir » ciento cuarenta (140) años.
Después de la muda, adquiere un nuevo exoesqueleto blando, que tiene que endurecerse. Durante este tiempo, la langosta es muy vulnerable a la depredación y, en consecuencia, son muy retraídas hasta que el nuevo exoesqueleto se endurece completamente. Consumen detritus, materiales vegetales y los peces y animales muertos que se encuentran en la zona inferior.
El rango de distribución de la langosta Espinosa abarca desde Carolina del Norte, las Bermudas, hasta Río de Janeiro y las Antillas, incluyendo Cuba, Jamaica, Haití y la República Dominicana.
LA LANGOSTA ESPINOSA DESAPARECERÁ EN EL CARIBE ORIENTAL EN MENOS DE DIEZ AÑOS.
El primero (1o.) de julio próximo, Nicaragua incursionará en estos rincones del Caribe, en una zona que se consideró secularmente pertenecíente al Archipiélago.
Ese día, una flota identificada con un número de motonaves igual a 22, desplegará más de 1.000 buzos por faena, lo que de acuerdo a expertos en la materia, es considerado como un esfuerzo sin precedentes.
Con prácticas terriblemente depredadoras, lo cual, agravado con la afectación de los ecosistemas marinos que forman parte de las aguas someras y profundas del Archipiélago, y un parásito que las está infectando, comprometiendo la fecundidad de las hembras, el escenario es oscuro y sombrío para la sobrevivencia de este crustáceo, científicamente denominado “Panulirus Argus”, cuya maldición es tener una carne apetecida por sus depredadores: los seres humanos, quienes con creencias afrodisíacas científicamente no comprobadas, las está conduciendo al borde de su insostenibilidad.
Nicaragua y Honduras manejan el 66% de la flota industrial con nasas, y el 34% con buzos que usan tanques, generando prácticas devastadoras.
Justo unos pocos días antes del inicio de la temporada regular de la pesca de langosta, se lleva a cabo un mini-sesión recreativa para buceadores, donde se premia la pesca de esta especie. Los buceadores pueden capturarlos con la mano enguantada, haciéndoles «cosquillas» con un taco o un palo para obligarlos a salir de sus madrigueras. En las Bahamas y el Caribe, también son pescadas con arpones (algo prohibido en Florida). http://www.laprensa.hn/…/a-salvar-la-langosta-espinosa
Así somos: Indolentes, ignorantes e inconscientes.
En Colombia la competencia para establecer las cuotas de pesca es la Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (Aunap) quien estableció para el 2017 una cuota de pesca marina de 64.603 toneladas. http://www.eltiempo.com/…/cuota-de-pesca-marina-en…
En relación a la pesca industrial, el número máximo por embarcaciones industriales será de 2.500 nasas, y para el caso de la pesquería artesanal, el número de naves será determinado por la autoridad de cada país de conformidad con los estudios técnicos que realicen al respecto, los materiales que se utilicen para su construcción, que en todo caso deberán ser biodegradables.
El Reglamento OPS -02-09 para el Ordenamiento Regional de la Pesquería de la Langosta del Caribe, ha prohibido el buceo autónomo, sin control en nuestros mares, y la captura, tenencia y comercialización de langostas que se encuentren en muda, así como de aquellas que estén en la fase reproductiva, fresadas o llenas de huevos, con espermateca , o cuyos huevos hayan sido removidos de la cola, y la comercialización de la carne de la cola de langosta sin caparazón, como también su carne molida. https://www.elaw.org/…/central-america-reglamento-osp…
No obstante que la WWF -World Wild Fund- lleva a cabo proyectos de mejoramiento pesquero (PMP) y de trazabilidad de la langosta espinosa, Nicaragua ha hecho caso omiso a los compromisos y recomendaciones efectuadas, y el primero (1o.) de marzo de 2016, la Asamblea Nacional autorizó de manera irresponsable, el buceo autónomo y no autónomo para la pesca de langostas con fines comerciales, tanto en el Pacífico como en el Caribe, de forma indefinida. http://www.laprensa.hn/…/a-salvar-la-langosta-espinosa
EL NEGOCIO DE LA LANGOSTA ESPINOSA : UNA TRATA DESPIADADA, ONEROSA E INSOSTENIBLE.
A pesar de que organizaciones internacionales no gubernamentales como,la World Wildlife Fund, WWF, vienen trabajando en su conservación, y otras de índole regional, como la Asociación de Pescadores del Caribe, Apesca, quienes firmaron un convenio a fin de promover buenas prácticas para la pesquería de langosta espinosa , y la comercialización responsable de este recurso marino, la situación para la especie no puede ser más desoladora y triste.
Las cifras más recientes que se tienen de la FAO, indican que la región centroamericana y el Caribe insular, incluyendo a los Estados Unidos de Norteamérica, capturaron en el año 2012, treinta mil seiscientos veinticinco toneladas de Langosta Espinosa, generando divisas en dólares por valor de trescientos setenta y ocho millones de dólares.
Cifras más cercanas a la realidad indican que en el área centroamericana se obtienen al año 40 mil toneladas de langosta.
Nicaragua participó del 11,6% del mercado centroamericano y el Caribe, obteniendo el 12,5% del total de los ingresos de la región.
Las cifras correspondientes a Nicaragua se han debido incrementar considerablemente a partir del fallo de la Corte de La Halla en noviembre del 2012, así como el desorden en el Mar que se viene presentando. “Quitasueño no pudo encontrar información confiable al respecto, y este es, precisamente, uno de los problemas más graves que existen en relación a este tipo de langosta: La falta de información oficial de Nicaragua.
Lo cierto es que “Luna Verde”, o “Green Moon”, uno de los bancos más productivos del área, tradicionalmente de los pescadores del Archipiélago, ha sido tácitamente abandonado por Colombia en favor de Nicaragua y, en este lugar se ejercen de manera permanente faenas de cruel depredación y castigo a las especies vivientes en su hábitat.
La AMP (Área Marina Protegida de la Reserva de Biosfera) se encuentra afectada por el fallo de La Haya, y su regulación sólo es objeto de control en él área que aún le pertenece al Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, y se considera actualmente como un “Area afectada de conservación”.
Las estadísticas muestran un peligroso descenso en las poblaciones de langosta, producto de mejoras en la tecnología de buceo y de barcos pesqueros que permitan capturas más abundantes, aunado a la degradación ambiental de sus hábitats, que ha incidido en sus tasas de reproducción. Así lo han reportado rotativos como el diario “La Prensa” de Nicaragua.
Por el momento los pescadores industriales colombianos vienen ejerciendo controles en la captura de langosta, con el fin de cumplir con las normas internacionales que velan, de cierta manera, por garantizar la sostenibilidad y sobrevivencia de la langosta espinosa, buscando consolidar una flota de 6 a 8 motonaves especializadas en langosta entera, lo cual, según la Bióloga Sanandresana, Dra. June Marie Mow Robinson, debería ser observado con mucho cuidado, adoptando el principio de precaución, que permita que la especie se recupere, más aún cuando se encuentra seriamente amenazada.
“Langosta juvenil” llamada por los depredadores, “Baby Lobster”
EL FRACASO DEL DERECHO INTERNO Y LA DIPLOMACIA COLOMBIANA
Colombia siempre ha vivido de espalda al mar, y la diplomacia colombiana, en todos los gobiernos, ha sido de rendición, sometimiento, entreguismo, y negociación hermética con los países limítrofes del área.
La Corte Constitucional ha tenido oídos sordos frente a las justas reclamaciones de los miembros de la Comunidad Raizal, Corine Duffis, y Walt Hayes, quienes por intermedio del Dr. Sergio Estrada Vélez, Director del Centro de Estudios Constitucionales de Medellín, interpusieron ante la Corporación, una Acción de Inconstitucionalidad, teniendo en cuenta que no se entiende cómo una jurisdicción internacional pueda proferir un fallo limítrofe, sin tener en cuenta la existencia y los derechos humanos de un pueblo, tratándose de derechos humanos, desconociendo el asentamiento secular del pueblo raizal de San Andrés y Providencia, dentro de los límites modificados.
El mismo estatuto de la Corte Internacional de Justicia no permite escuchar a los pueblos, solamente a los Estados. Pero si se trata de derechos humanos es otro el argumento, por cuanto la Corte Internacional no podía desconocer el asentamiento secular del pueblo étnico raízal de San Andrés y Providencia dentro de los límites modificados.
Colombia aún no sabe cómo comportarse frente a este asunto tan complejo, que requiere una pronta intervención, en defensa de los derechos históricos del pueblo raizal y la Reserva dé Biosfera , la cual ni siquiera mencionó dentro de sus argumentos de defensa en La Corte Internacional de La Halla.
La documentación que Colombia construye y recopila, sobre casos de pesca ilegal por parte de Nicaragua, en el área de la Reserva de Biósfera, poco ha servido, y ni siquiera han sido admitidas como prueba contra el país centroamericano, por la Corte Internacional.
Expertos de la Universidad del “Goldman School of Public Policy” de la Universidad de Berkley, recomendaron desde mayo del 2014, el ingreso sin dilaciones de Colombia a la “Organización del Sector Pesquero y Acuícola del Istmo Centroamericano” -OSPESCA- , desde donde se pueden impulsar estrategias, programas, proyectos, acuerdos o convenios regionales de pesca y acuicultura, fomentando la organización regional de productores de pesca y acuicultura.
Ante tanta desidia, irresponsabilidad e indolencia, y antes que nos toque entornar un “requiem in pacem”, comencemos desde ya a hacer campañas en defensa de la conservación y sobrevivencia de la langosta espinosa, o Panulirus Argus.
“Todos somos responsables de nuestra insensibilidad, desinterés, desdén y apatía.
Y la Gobernación de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, a través del Secretario de Despacho y, la Junta Departamental de Pesca, no dicen nada, no proponen nada, y tampoco hacen nada, por lo menos que sepamos.
Tomado de Quitasueño