
La historiadora Erika Denise Edwards, experta en identidades raciales, expuso sus argumentos en un artículo para ‘The Washington Post’.
El fútbol implica más que patear una pelota, para nadie es un secreto. Tan grande es el fútbol que hasta permite analizar la búsqueda de algunos países sudamericanos por construirse como “naciones blancas”.
Ese es el planteamiento de Erika Denise Edwards, profesora asociada del Departamento de Historia de la Universidad de Texas, en El Paso, en The Washington Post, en el cual indagó por qué la selección de Argentina no tiene jugadores negros en el Mundial de Qatar 2022.
«En realidad, Argentina ha sido el hogar de muchos negros durante siglos, no solo la población de personas esclavizadas y sus descendientes, sino inmigrantes”. Para muestra, un botón: entre 1930 y 1940 aumentó el número de migrantes de Cabo Verde para desempeñarse como marineros, por ejemplo.»
Entonces, ¿por qué la albiceleste no tiene negros?
Según Erika Denise Edwards, la ausencia de jugadores negros en la selección de Argentina es producto de una narrativa gubernamental desde la segunda mitad del siglo XIX, “para borrar la negritud porque en Argentina equipararon la modernidad con la blancura”, como también lo intentaron hacer Brasil, Uruguay y Cuba.
Para dar sustento a sus palabras, la historiadora citó a Domingo Faustino Sarmiento, presidente de Argentina 1868 a 1874. “Dentro de veinte años habrá que viajar a Brasil para ver negros”, dijo el mandatario, de acuerdo con la autora.
Evidencia de la búsqueda de construir su imagen como país blanco, conforme con la historiadora, fue la promoción de la inmigración de europeos blancos al país establecida en la primera Constitución Política de Argentina.
“El gobierno federal fomentará la inmigración europea”, reza un apartado de la carta magna.
“En cuanto a las poblaciones negras y amerindias de la nación que estaban en Argentina antes de esta inmigración europea masiva, muchos comenzaron a identificarse estratégicamente como blancos si podían ‘pasar’ o a establecerse en categorías raciales y étnicas más ambiguas”, aseguró la autora.
Las categorías en mención son criollo, pardo, trigueño o morocho —color canela—, siendo uno de ellos Diego Armando Maradona. De hecho, aunque en la selección no hay negros, más de uno es morocho, como el mítico ‘10′, dejando en evidencia las raíces negras.
“A pesar de una historia y sus rezagos que han buscado borrar la negritud de la nación, la población negra argentina permanece, y más afrodescendientes han ido migrando hacia allá”, afirmó Erika Denise Edwards.
Con información de Semana y foto de Reuters.