
Otro incidente más estuvo a punto de ocasionar una nueva tragedia en San Andrés por el absoluto descontrol de las autoridades marítimas de la isla.
The Archipielago Press conoció que este día primero de enero un pontón que dio reversa, el cual se encontraba en el bar Rasta que se fondea en la misma zona de White Watta donde ya han ocurrido dos accidentes mortales embistió a dos mujeres, resultando afectada una joven de 31 años de edad quien debió ser atendida en el hospital departamental para cerrar la herida causada por la hélice del motor del aparato, resultando con nueve puntos de sutura en la parte posterior de la rodilla.

Según relató a esta redacción una fuente, la hermana de la víctima salvó a la mujer de un accidente mayor, y considera que la herida no fue mortal por que tenía el cabello recogido y eso evitó que quedara enredada en las hélices del motor.
Según el testimonio de ésta, en el lugar no existe ningún control, hay absoluto desorden, no hace presencia ninguna autoridad y lo que se observa en quienes manejan este tipo de artefactos es consumo de alcohol, incluido el causante de este nuevo incidente, quien llevó a la víctima hasta el hospital y luego desapareció.
Aún cuando el caso no pasó a mayores, la familia de la joven mujer decidió suspender las vacaciones e irse de regreso a la ciudad de Medellín para recibir una valoración y atención de mayor complejidad, y aún cuando la víctima fue dada de alta de inmediato, presenta limitaciones en la movilidad.
Este es el mensaje que sobre el mencionado incidente remitió una fuente a The Archipielago Press:
«Ayer en horas de la tarde nuevamente otro accidente de en aguas de San Andrés cuando una joven de Medellin , que disfrutaba junto a su familia cerca a la embarcación Rasta….. el capitán de un pontón en forma irresponsable dando reverso atropello a las niñas que se estaban subiendo al pontón. Como resultado del accidente la joven resultó cortada en la pierna derecha. Fue trasladada al hospital do de fue atendida. Ninguna autoridad se hizo presente para atender este nuevo accidente.»
La proliferación de pontones y embarcaciones en manos de personas que nisiquiera exhiben un certificado como gente de mar o patrón de bote, asociado a actividades de celebración con licor, esta generando un caos marítimo en la isla, a lo que se suma la falta de control y presencia de las autoridades encargadas de la vigilancia de estos asuntos.
El pasado 27 de noviembre una joven ingeniera de la ciudad de Cali murió luego que fue embestida por un yate que opera en el muelle del Hotel Sunrise Beach GHL, el cual estuvo retenido por un par de semanas y luego le fue devuelto a sus propietarios.

Esta es la segunda víctima mortal ya que hace varios años atrás otra joven, residente de la isla también fue embestida por una lancha en el mismo sector de Withe Watta, con mutilaciones causadas en su cuerpo por la propela de la embarcación que pasaba por el lugar, el cual es zona de tránsito navegable, al tiempo que es usada como playa inmersa en medio de la Bahía de San Andrés.
El fondeo permanente de los bares Rasta e Ibiza, que son plataformas dedicadas como bailadero y restaurante, donde también se consume licor, atrae gran cantidad de embarcaciones tipo lancha y pontones, con turistas y residentes a bordo, pero no hay ni delimitación ni señalización, y prácticamente se navega a ciegas sin saber quien está sumergido en el agua.